A los buenos recuerdos que me envuelven de mis distintas visitas a Olba y sus barrios, se une un motivo más. Capi, nuestro osico amoroso, comparte vida con una chica de esta localidad. Todo indica que por fin a encontrado su sitio y en la fotografía que nos han enviado podemos comprobar como disfruta de su libertad.
En breve va a venir de revisión al Centro Clínico Veterinario de Teruel. Tanto Fina como yo intentaremos acercarnos para darle un achuchón.
Muchísimas gracias a esta persona de Olba, que le va a dar la oportunidad que se merece.

